A veces las personas mayores pueden sufrir molestias al caminar. Las muletas o bastones son soportes auxiliares para mejorar la movilidad de las personas de edad. Sirven, por ejemplo, como ayuda tras una operación o cualquier procedimiento en la rodilla o en la parte inferior de la pierna, incluso si han sufrido un derrame cerebral, es conveniente un apoyo adicional que mejore y ayude a las personas de edad al caminar mientras se recuperan. El uso de muletas, bastones o andadores o accesorios para andadores ayuda a mantener el peso del cuerpo mejor repartido para evitar forzar la pierna lesionada o débil, proporcionando ayuda en el equilibrio y permitiendo realizar las labores diarias de forma más segura.
Normalmente, si utilizamos un bastón o una muleta, deberíamos llevar el soporte en el lado contrario a la pierna que tenemos afectada. Los bastones se pueden usar como ayuda para caminar o incluso como elemento cotidiano para mejorar la autonomía de las personas mayores. En general, tanto las muletas como los bastones, son soportes prácticos y útiles para las personas que tienen algún tipo de problema crónico o transitorio.
Tener un soporte auxiliar de un solo punto para caminar resulta funcional en la mayoría de las ocasiones, aliviando el dolor y la incomodidad. Es un elemento que no ocupa apenas espacio, por lo que se puede utilizar en cualquier lugar. Son herramientas con diseños sencillos que permiten un apoyo parcial del cuerpo.
¿Qué es una muleta ortopédica?
Las muletas para personas mayores están diseñadas para ayudar a las personas con movilidad reducida, proporcionando todo el apoyo que el anciano necesita para caminar o estar de pie. La estructura es adaptable por lo que podemos regular la altura de las muletas al usuario, ofreciendo mayor comodidad.
¿Para qué sirve muleta ortopédica?
Las muletas suelen utilizarse más como complemento de rehabilitación tras una operación o ayuda ortopédica. Las muletas son una de los soportes técnicos más usados por las personas mayores como ayuda para caminar. Permiten al usuario apoyar parte del peso, aportando seguridad y facilitando los movimientos al caminar.
¿Qué es un bastón ortopédico?
Los bastones son un tipo de soporte técnico muy utilizado entre las personas de la tercera edad. Es un instrumento muy útil que permite repartir el peso de cuerpo, dando seguridad y aportando a la personas mayores más autonomía al caminar.
¿Para qué sirve un bastón ortopédico?
Estos soportes se utilizan para descargar o aligerar la presión que se ejerce en las articulaciones dañadas, por artrosis, una operación, desgaste, etc. Es importante que adaptemos la altura del bastón a nuestra medida, para no sobrecargar los músculos y las articulaciones. Para saber si está bien regulada, la empuñadura del bastón debería estar al mismo nivel que la parte de mayor del fémur.
¿Qué diferencia hay entre un bastón y una muleta?
La diferencia está en tipo de necesidad que tenga la persona mayor. Ahora explicamos algunas diferencias según la situación del usuario.
El bastón es un soporte que puede ayudar al anciano a mantener la movilidad en caso de que tenga una lesión leve o simplemente alivie la carga de su pierna dolorida. Es recomendable leer algunos consejos o ideas para elegir un soporte adecuado y útil para caminar.
El elemento de un solo punto, es decir, el bastón, proporciona un apoyo más pequeño al caminar, está diseñado para repartir el peso corporal a la muñeca o al antebrazo. Se suele utilizar para lesiones menores o para mejorar el equilibrio.
Si la persona de edad no puede cargar con la pierna afectada, por ejemplo, si se ha sometido a algún tipo de cirugía en la rodilla o el pie, entonces elegir una o dos muletas (dependiendo del caso de la lesión) es la mejor solución. Si elegimos usar dos, mejoraremos considerablemente el equilibrio. Mantienen el peso mejor que el bastón y le permiten moverse con una pierna.
¿Por qué elegir un bastón o una muleta?
Actualmente, para las personas que tienen dificultad para caminar (con discapacidades, personas mayores, etc.), existen muchos modelos de soportes.
Las muletas son necesarias en el período de rehabilitación temprana después de una lesión, así como en el caso de que el paciente requiera un apoyo sólido constante. Los médicos no recomiendan el uso regular de muletas axilares durante más de 2 años, ya que la dependencia prolongada de las muletas a menudo causa adormecimiento de las manos y dolor en el hombro.
Si el período de rehabilitación es largo, después de un tiempo se recomienda cambiar a soportes para caminar más ligeros y manejables. Por eso, es bueno alternar el soporte si la situación nos los permite. El bastón es ligero y ocupa poco espacio, por lo que podemos llevarlo siempre con nosotros, ya sea como apoyo principal o secundario.